Radiofrecuencia
Por definición, la Radiofrecuencia es un tratamiento de calor inducido o controlado que se aplica mediante un cabezal. ¿Cómo actúa parar lograr el efecto antiaging? Está comprobado que si la molécula del colágeno presente en la piel, es sometida a más de 42° focales, se tensa la piel. Este efecto se logra ya que el colágeno tiene forma de “tirabuzón”, que con el paso del tiempo se va estirando, provocando flacidez. Entonces, al ser expuesto al calor medido y puntual, el tirabuzón se acorta, tensando la zona tratada.
Existen distintas clases de equipos de Radiofrecuencia que varían en la cantidad de cabezales que emiten calor (Radiofrecuencia bipolar, tripolar), siendo el Fraxface el más potente a la hora de actuar en la piel, ya que emite Radiofrecuencia fraccionada. Este aparato funciona creando una grilla con cuadrados de 2 cm por 2 cm en la zona de acción.
Puede aplicarse en cualquier parte del cuerpo donde haya flacidez. La Radiofrecuencia en glúteos, zona abdominal o facial son las más solicitadas. Este tratamiento también es apto para cuello, brazos, entrepiernas o labios mayores de vagina.
Se recomienda para iniciar 4 sesiones, separadas por 30 días y luego sesiones de mantenimiento cada 3-4 meses aproximadamente. Las sesiones de mantenimiento son importantes, ya que el cuerpo continúa con su proceso de envejecimiento y realizando sesiones a lo largo del tiempo ayudamos a mantener la tensión de la piel.
La Radiofrecuencia no tiene “efecto rebote” o adverso, pero el profesional debe tener cuidado con la potencia que utiliza, porque se han detectado casos de quemadura por Radiofrecuencia. Siempre hay que acudir a un Médico experto en el uso de estas energías, que sepa regular el calor a aplicar. Es un tratamiento de consultorio, donde se usa crema anestésica ya que puede generar una leve molestia. Luego, la piel puede llegar a quedar colorada como si hubiera estado al sol, durante 48-72 horas.
En cuanto a los cuidados posteriores , se recomienda protección solar durante los primeros 20 días y uso abundante de crema hidratante para colaborar en la regeneración de la piel.